Sin nociones arquitectónicas y con nulos conocimientos albañilerísticos, me dispuse a construir un mundo, introspectivo y personal, donde todas las teorías del mercado no eran nada más que papel de baño. Asinfonías del retrete . De esta forma fue como me convertí en el enemigo número uno, de las ráfagas flatulenplásticas de lo concreto...
2 comentarios:
HOla David!!
Menudo cambio de blog, me encanta.
Haikus, cavilas con mensajes...
Te sigo, cambié de pc y perdí los favoritos.
Pero ya te vuelvo añadir.
Besitos Primo :-)
Me encanta tu lema: 1-2-3 por mí, porque siempre es bueno tocar base... Y jugar y reír, la vida es un juego.
No creo que estés colapsado y que tu construcción interna sea material desechable. Más bien veo que te re-construyes con materiales nobles y color, mucho color :-)
Nos seguimos leyendo!
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