Pensamiento Reciclado...

Nomás fluyó por mi mente −¿Y por qué no?−, y la respuesta clara y certera un simple que más da.Y entonces he aquí un pensamiento que se quedó enfrascado en el ordenador y lo liberé ahora que ya no duele.

Alina tú me mandabas a Boston
cuando me encontraba en Kansas,
yo te hacía Vietnamita
cuando tú te jurabas Filipina.

Yo hablaba de revolución
tú, de hadas...
Que si el Che Guevara,
el comunismo y el ejercito rojillo,
que las nixies cuidan los ríos
con sus cuerpecillos semitranslucidos.

Y ahora que todo es tan absurdo
y claro como el Sol o la Lluvia,
Como ese Sol impresionista
que llena de Sombra la Laguna
frente a tu escuela...
Como esa obscura lluvia repentina
que ilumina el Parque
frente a mi departamento.

Alina, ¡ahora si que estamos lejos!,
tú con tu vida,
yo con la mía.
Pero así han de ser las cosas tan simples
como el correr del tiempo en el reloj,
Como el tener que quedarse
o el marcharse...

¿Y qué hay de aquella gota evaporandose?
cuando tú te sentías delgada
y yo pesaba.
¡Sí! aquella gotita de agua
que sonaba y sonaba
cual melodía desde la cocina hasta la sala.
La que dije me encantaba
y de pronto entre mis manos sostenía,
en el ánfora de taponcito colorado.

Evoco esa tarde de tertulia y charla amena,
y hoy que vuelvo a tener entre mis manos
aquel recipiente del pasado,
me doy cuenta, que el tiempo huye...
las cosas desaparecen, la gota se ha secado.

Y ¿Qué va pasar ahora?
Dime Alina.
¡Sí!, qué va pasar ahora
sin esa clara gotita ¿ - - - - - - - - ?.